El casco antiguo, formado por callejuelas laberínticas pavimentadas con piedras extraídas de la orilla del mar, es dominado por la iglesia de Santa Maria, del gótico tardío, con la fachada pintada de blanco. Desde aquí hay una vista preciosa del pueblo y de la bahía. De la muralla medieval sólo se conserva un antiguo baluarte integrado en el ayuntamiento.
En el centro del pueblo y delante del paseo maritimo pueden ser admirados varios edificios modernistas, algunos inspirados en la arquitectura cubana, como Casa Serinyana, Casa Rahola, Torre del Colom, el antiguo teatro y el Casino de la Amistad.
Hacia el noreste de la población de Cadaqués se encuentra el Portlligat, un diminuto pueblo mediterráneo conocido internacionalmente por ser el lugar donde Salvador Dalí residió durante mucho tiempo. Situado en la pequeña Cala de Portlligat, el pueblo tiene una única calle flanqueada por típicas barracas de pescadores, con la Casa-Museo Dalí entre ellas.