Sitges se encuentra en la Costa del Garraf, a 38 kilómetros al sur de Barcelona y al pie del macizo del Garraf.
La parte mas interesante es la Vila Vella (Villa Vieja en castellano), un conjunto de calles estrechas con casas blancas y balcones adornados con flores, declarada bien cultural de interés nacional. El casco antiguo de Sitges ocupa un pequeño promontorio que domina las playas, conocido como la Punta. El principal monumento es la iglesia Sant Bartomeu y Santa Tecla, barroca del siglo XVIII. Su silueta asimétrica perfilada sobre el azul del mar y del cielo se ha convertido en el símbolo de la ciudad de Sitges.
Junto a la iglesia se encuentran la Casa de la Vila (el Ayuntamiento), edificio neogótico de finales del siglo XIX, y unos esplendidos palacios modernistas como el Palacio Maricel (Museo Maricel del Mar), la Casa Bacardí,, o el Museo Cau Ferrat.
Uno de los principales atractivos de Sitges son los cuatro kilometros de playa. Sus 18 playas, algunas de ellas con la distinción de calidad "Bandera Azul", muy conocidas por la excelente calidad de las aguas, de la arena o por los servicios ofrecidos, atraen en cada verano una gran multitud de turistas. Vale la pena salir a pasear por el amplio paseo marítimo con los imponentes mansiones de los indianos a un lado y el mar al otro. Detras del casco antiguo se encuentra la hermosa Playa de Sant Sebastià, con buenos restaurantes y terrazas encantadoras.
Sitges dispone de una merecida fama por lo que respecta a ocio nocturno, concentrado básicamente en el centro urbano. A lo largo de la calle Primer de Maig, más conocida como la Calle del Pecado, se suceden una multitud de bares, pubs, discotecas y locales de ambiente homosexual.