El agua es el protagonista principal del parque, con sus más de 200 lagos o estanys, ríos, torrentes, cascadas y humedales. Es una de las zonas de mayor concentración de lagos pirenaicos. Algunos lagos se encuentran en los fondos de los valles (Sant Maurici, Llong, Sarradé) pero la mayoría ocupan los altos circos glaciares (Monges, Contraix, Negre, Mangades, Germer).
El Parque ofrece una extensa muestra de paisajes vegetales de alta montaña pirenaica, con una gran diversidad de especies. La Mata de València d'Àneu es el abetal más importante de la Península Ibérica, con ejemplares que sobrepasan los 40 m de altura. El rey de la fauna del parque es el sarrio o rebeco. Es posible avistar marmotas, armiños, ardilla rojas o lagópodos alpinos. Las aves más espectaculares son el águila, el búho, el halcón, el urogallo.
El acceso habitual al corazón del parque es a través de Espot y Boí. Sólo se puede acceder a la zona protegida a pie, en bicicleta o en vehículos autorizados 4x4. El Parque dispone de una extensa red de caminos y senderos señalizados. Es posible visitar el Parque durante todo el año.